El poliéster es una fibra sintética, la cual es económica, fácil de encontrar en el mercado y se pueden obtener varios atributos a partir de ella. Se caracteriza por su resistencia a la luz solar y a la mayoría de los productos químicos. Es una fibra termoplástica, lo que evita que aparezcan arrugas y que cambie su forma y diseño incluso con las lavadas. También es elástica y resistente a roturas y hongos, además de ser bastante liviana en comparación a otras telas.
Generalmente las empresas textiles mezclan el poliéster con fibras naturales, así el producto final tiene las propiedades de este material, pero con la apariencia de una fibra natural, obteniendo un acabado más estético para las prendas.
Así mismo, el poliéster es muy parecido al nylon, pero las fibras del poliéster son procesadas en calor para darle mayor resistencia. Es muy fácil de lavar y se seca rápido. En sí no es una tela impermeable, pero sus condiciones pueden mejorar al combinarse con otras telas.
A continuación, te mostramos algunos beneficios de esta tela:
- No se encoje, o deforma con facilidad. Lo que ayuda en casa al momento de lavarla, no debes preocuparte por colocarla en lavadora y secadora, porque es resistente.
- Tiene mayor durabilidad al transcurrir el tiempo, es difícil que le encuentres a una prenda de poliéster hongos y polilla.
- El alto porcentaje de poliéster en la composición de la ropa contribuye a que se arrugue menos, sea más fácil su planchado y se conserve en el día.
Las telas que presentan una combinación de poliéster con fibras naturales pueden ser beneficiosas pues dan más versatilidad a la prenda, permiten que la piel respire y las manchas de polvo o grasas puedes retirarlas con más facilidad. Además, se mantienen en el rango de un presupuesto modesto más al alcance de todos y pueden tener una duración más larga que prendas de otro material.